Nueva derrota del Real Sporting, cuatro jornadas sin conseguir la victoria y, sobre todo, un equipo que cada vez genera más dudas sobre su nivel competitivo para aspirar a metas importantes en la categoría. Un Huesca muy necesitado de puntos salió con lo mejor que tenía. Una línea de cuatro típica en los equipos de Bolo; junto a un doble pivote muy posicional como Sielva y Jesús; tres jugadores por delante con calidad y mucha movilidad, que hicieron daño cuando se interiorizaban y buscaban las espaldas tanto de los pivotes como de los centrales; y una referencia clara en las disputas como Sergi Enrich.