Durante años, Toyota ha sido sinónimo de híbridos. El Yaris, el Corolla, el C-HR, el RAV4 todos han ido sumándose a la ola electrificada que la marca japonesa inició mucho antes que nadie. Sin embargo, había un modelo que seguía sin esa versión, y era, curiosamente, el que más lógica tenía que la tuviera: el Aygo X Cross, el coche más urbano de toda la gama.