Los aficionados a los caballos y a disfrutar de tiempo de calidad junto a sus seres queridos no se quisieron perder ayer el inicio de una de las citas más especiales del verano asturiano. El Concurso Hípico Internacional de Gijón, que celebra este año su 82.ª edición, a pesar de ser de los últimos eventos antes de la vuelta a la rutina, atrajo ayer a cientos de locales y visitantes en el hipódromo de Las Mestas. El ruido de los cascos de caballos puso la música de fondo al ambiente "festivo y familiar" de Las Mestas.