Si Santi Cazorla fue Batman, el hombre que rescató a Gotham en los momentos difíciles, Haisem Hassan fue Robin, su inseparable aliado, el “sidekick” que todo héroe necesita para completar su misión. La irrupción de Santi, ese zurdazo mágico a la red, engulló todo el protagonismo del choque que cita al Oviedo en la final por el ascenso, pero nadie puede obviar el fantástico papel de un Hassan que firmó la, seguramente, actuación más redonda de la temporada.