El 19,6% de los estudiantes catalanes de entre 15 y 16 años tienen un nivel bajo de inglés. Es decir, no llegan a los conocimientos mínimos, según los resultados de las pruebas de competencias básicas en 4º de ESO. Más allá de los planes oficiales para potenciar el idioma en las aulas, la directora de infantil y primaria en el campus BSB Sitges de The British School of Barcelona, Emily Henderson, apuesta por incular el idioma con métodos lúdicos para que los niños no se sientan presionados. En su opinión, el aprendizaje se debería reforzar también en casa con herramientas sencillas. Henderson atiende a EL PERIÓDICO en un descanso del horario escolar para explicar cómo madres y padres pueden contribuir a mejorar el nivel de inglés de sus hijos e hijas, algo imprescindible para su futuro laboral.