"Un gran avance de cara al futuro y un marco legal muy demandado por el sector para poder tener una estrategia definida". Así valoran científicos e investigadores asturianos la aprobación de la primera ley de Ciencia, que sacó adelante la Junta General esta semana con el voto a favor de todos los partidos salvo Vox, que se abstuvo. Este texto normativo, que lleva el sello del consejero Borja Sánchez –de baja por un cáncer de colon–, pretende situar a Asturias como referente del sector, incrementar la financiación y retener el talento, entre otros objetivos.