La decoración navideña va más allá del árbol, el portal de Belén o la corona en la puerta. Desde hace unos años, en los hogares españoles todo tiene un toque navideño. Las velas son rojas, los cojines del sofá cambian a diseños propios para la época del año y, por suspuesto, el mantel para las comidas y cenas familiares también va acorde con esta fiebre por los renos, cascabeles y muñecos de gengibre.