"Ye to ponese". Esa es la jocosa respuesta de Héctor Moro sobre si tras haberse pegado una paliza en bicicleta junto a su amigo Roberto Camblor, se animaría a correr una prueba ciclista. El atleta lavianés dejó sus zapatillas Joma, con las que habitualmente realiza sus retos solidarios, para subirse a la bici y pedalear para recaudar fondos contra la esclerosis múltiple, un dinero que superó los 1.500 euros. Fueron casi 280 kilómetros pedaleando, más que una etapa reina de La Vuelta a España. Pero la verdadera reina de la jornada fue Sonia García, amiga de los dos participantes en este reto solidario, y que padece esclerosis. "Ella fue el motor de este desafío", indicaba Moro.